1) ¿Cuáles pueden ser los orígenes de tu falta de atención consciente?
Roxana: “Hacer muchas tareas a la vez sin saber clasificarlas o jerarquizarlas,
no saber dar prioridad a las tareas que sí lo son frente a las que no lo son, debido al aturullo mental- Dispersión de tareas-. Momento de confusión en el que se quiere hacer todo al mismo tiempo sin prestar atención a nada, produciendo bloqueo mental.
O “atender a los demás y no a mí misma”. Olvidarse de uno mismo dando
siempre prioridad a los demás, olvidando tus propias necesidades.
Ana: “El ruido de la ciudad, ya no veo la TV porque me genera ruido”. El mundo moderno en el que habitamos no ayuda para las introspección o búsqueda de uno mismo.
Laura: “Una emoción negativa” Recordar emociones negativas del pasado y
entrar en bucle con ellas una y otra vez.
Mónica: “Ondular con mi mente entre el pasado y el futuro”. Tiendo a no vivir
el presente, recordando cosas del pasado para revivirlas en mi recuerdo y a mi manera personal haciendo mi propia versión, hago lo mimo con el futuro, me lo imagino según mi antojo…. mientras, no vivo el momento actual que es donde únicamente existo.
2) ¿Cuáles son las consecuencias de mi falta de atención consciente?
Como vivo en automático porque me disperso en tareas, siento que se desestructura el camino, va todo en bucle…
Eso me genera ansiedad y sufrimiento.
No disfrutar.
Sentimiento de culpa por no ser eficiente: autoexigencia, al no poder
concentrarme, no estoy presente y las cosas salen peor que si las hubiese hecho con amor y dedicación.
3) ¿Cuáles son las consecuencias cuando tengo atención consciente?
Paz (se habló de paz mental, pero también de la espiritual y corporal).
Consciente repercusión de mis actos, todos los actos tienen efectos.
Control de la ansiedad.
Tomar mejores decisiones.
Calidad de vida.
Disfrutar de las cosas porque hay atención plena.
Mayor Crecimiento a todos los niveles, dado que cada cosa que vivo es más intensa y obtengo de ella mayor conocimiento.
4) Estrategias para cultivar la atención consciente:
Jorge: “Parar y fijarse con detenimiento en las texturas de los objetos que te rodean”.
Roxana: “Ir en bicicleta, siempre que no te sientas como Mario Bros dentro del vídeojuego”.
Saber escuchar tu cuerpo (las enfermedades son un aviso de que algo no va bien).
Ana: “Rutina y disciplina”. Esa disciplina con atención ayuda a centrarte y no dispersar tu mente.
Conectar con la naturaleza para escapar del mundo moderno que nos atrapa,
desconectando los móviles, tabletas, tv…
Bailar: es decir hacer cosas que te salen del corazón.
Hacer tareas con amor.
Mónica: “Saber seleccionar tareas, momentos, personas…”
5) ¿Por qué huimos de nosotros mismos?
Nieves: “Por la existencia de un vacío espiritual”.
Carlos: “El miedo a enfrentarnos al vacío, a la carencia, tratar de afianzar la idea del “yo” que queremos proyectar, pues ese “yo” que queremos alimentar, no existe realmente”. La necesidad de crearnos nuestra propia identidad para sentirnos más seguros, cuando realmente ese “yo” no existe.” Idea de la enseñanza budista.